miércoles, 31 de enero de 2018

¡Felicidades, Majestad!

¡Felicidades, Majestad!



            Majestad: permítame que me dirija a usted con cierta complicidad generacional, y disculpe si le hablo con ese tono de conocimiento que a veces usamos los profesores, aunque tal vez sea porque, aunque por solo diez días, puedo decir que soy algo mayor que el rey. De todos modos, no creo que necesite muchos consejos, porque desde el inicio de su reinado ha sabido demostrar un excelente criterio y un perfecto entendimiento de las situaciones. Pero es claro que, como su padre, no está teniendo un comienzo fácil. Un contexto de crisis económica, social y territorial no es, desde luego, el clima más favorable. Lo peor es que el problema no le afecta solo a usted y a la monarquía, sino a todas las instituciones, a nuestro entero sistema constitucional, y por supuesto a España como Estado y como nación. No sé si este reto es mayor, menor o similar que los que tuvo que afrontar el rey Juan Carlos al inicio de su reinado, pero me temo que hay alguna dificultad adicional para resolverlo, debido al hecho de que ahora, a diferencia de aquel momento, no hay un apoyo prácticamente unánime a la Corona, ni en las fuerzas políticas ni en la sociedad. A pesar de ello, sigue siendo una institución muy bien valorada, y los que la prefieren para España siempre han sido mayoría; una mayoría que se ha incrementado desde que usted encarna la institución.


            Y creo que ese fenómeno está plenamente justificado. Porque su compromiso con la defensa de la Corona y de España ha sido inequívoco desde su acceso al trono. En primer lugar, ha iniciado una clara labor de modernización de la monarquía, tarea que explicitó desde el primer discurso, y que se ha puesto en práctica en aspectos como la transparencia, la austeridad y la cercanía. En cuanto a la defensa de la Constitución y la unidad nacional, es obvio que no cabe esperar de la Corona lo que esta no puede ni debe hacer en un sistema de monarquía parlamentaria. Pero lo que ha hecho ha sido importante, por su claridad, su compromiso y su “auctoritas”. Y no es nada aventurado afirmar que su memorable discurso del 3 de octubre actuó como factor desencadenante para que muchas personas, en Cataluña, perdieran el temor a expresar su defensa de España, Europa y la Constitución. Tiene usted la cercanía de su padre y a elegancia de su madre, y en la reciente entrega del toisón de oro a la princesa de Asturias, lo demostró una vez más, con un emotivo y cercano discurso que logró combinar a la perfección su papel de rey, padre, y cómplice y apoyo de su hija. España tiene ya mucho que agradecerle. Siga siempre en esta línea de defensa de España y de la Constitución, dentro del papel que esta le da, que es de ninguna “potestas”, pero toda la “auctoritas” que usted logre. Su papel es tan importante, que después de este tipo de discursos, a los críticos solo les queda recordar que el acceso a la jefatura del Estado es vitalicio y hereditario. Como si la monarquía parlamentaria no fuera plenamente compatible con la democracia, como demuestra su pervivencia en algunas de las democracias más avanzadas del mundo. Como si, después de todo y para la España de hoy, esta monarquía no tuviera incluso algunas ventajas, como la neutralidad, el prestigio, y la capacidad de generar empatía, que usted sabe ganar cada día, y que difícilmente cabría imaginar en una persona vinculada a un partido político. Como si el rey tuviera algún poder político o fuera algo diferente a un símbolo, probablemente el más importante, de nuestros valores constitucionales. Como si, en suma, la monarquía parlamentaria no hubiera sido refrendada por el pueblo soberano en la propia Constitución, sin que las fuerzas que proponen su supresión hayan sido nunca mayoritarias en estas cuatro décadas. Majestad, usted lo sabe perfectamente: ninguna monarquía puede ser más racional que la República. Y en la monarquía parlamentaria, el rey lo es “por la gracia de la Constitución”, y en definitiva por voluntad del pueblo soberano, que en cualquier momento puede establecer una República, si la monarquía deja de ser útil. Pero no todo es racional, y cada país debe encontrar la forma de gobierno que mejor represente su esencia y su historia, en el momento presente. Por su carácter simbólico, un rey puede ser el mejor catalizador del sentimiento constitucional, y usted, que se preparó para ello casi desde su nacimiento, ha hecho con sus palabras y con sus obras mucho más que ninguna justificación racional por generar ese sentimiento de identificación, de unidad, y de orgullo (aunque sea un orgullo crítico y reformista) por pertenecer a esta España constitucional. Muchas felicidades.

(Fuente de la imagen: https://elcomercio.pe/mundo/actualidad/espana-rey-felipe-vi-celebra-50-anos-condecorando-heredera-video-noticia-493181)

jueves, 25 de enero de 2018

Medio siglo

Medio siglo


        
    Con medio siglo de vida, ya sé que aquello que decía el poeta de que no hay que engañarse pensado que ha de durar lo que se espera más que duró lo que se vio, no es solamente por la percepción subjetiva de que “todo ha de pasar por tal manera”, sino muy probablemente porque de forma objetiva y cuantitativa, así será. Y aunque tampoco es cosa de ponerle límites a la providencia divina, sí hay que admitir que, como dice la letra de Sabina, “más antes que después he de enfrentarme/ al delicado momento/ de empezar a pensar en recogerme…” Pero es este un bonito momento de la vida en el que uno puede mirar al pasado y valorar (mejor o peor) lo ya hecho, sin dejar de lado lo que todavía queda por hacer. Un momento en el que, repasando, compruebo que nunca me he arrepentido de haber hecho lo correcto, ni de ayudar a los demás, y más bien solo lamento aquello en lo que me haya podido equivocar, o que haya podido dañar a alguien. Lo bueno es que aún estoy a tiempo de aprender la enseñanza de esa valoración, y aplicarla al futuro.


            Con medio siglo, he aprendido (aunque a veces cueste ponerlo en práctica) a no preocuparme demasiado por lo que no es realmente relevante; a afrontar los problemas con cierta serenidad; a dar importancia a aquello que realmente la tiene, y que no son tantas cosas. Jesús, en las bodas de Caná, nos lo puso de manifiesto: primero, haz caso a tu madre en lo que te pida (y eso podemos extenderlo a la familia); segundo, ayuda a tus amigos en lo que necesiten; tercero, si vas a celebrar algo importante, no te olvides de que haya un buen vino en cantidad suficiente. Con medio siglo, he aprendido a no hacer caso de libros de autoayuda, ni mucho menos de los típicos consejos hedonistas y egoístas: ocúpate de ti, cuídate, piensa en ti, date un capricho. Mucho mejor que estas pamplinas propias de redes sociales y cadenas, sería justo el consejo contrario: piensa en qué medida lo que haces ayuda a los demás, es útil a alguien, aportará algo a otros. He aprendido a no preocuparme demasiado ni por el poder, ni por el dinero, ni por el reconocimiento que solo alimenta a la vanidad (aunque también sé que para decir esto, hay que haber logrado satisfacer tus necesidades básicas, y saber cómo no buscarte muchas más); es más importante pensar en qué quedará y qué sentido tendrá lo que estás haciendo. Y creo que, si interiorizo todo esto, y Dios me da vida y salud, tengo la oportunidad de ponerlo en práctica en el futuro. Si es así, sé que mi mejor obra será la que todavía está por hacerse.  

(Fuente de la imagen: http://www.noticierodelllano.com/noticia/con-variado-programa%C2%A0cofrem-celebra-medio-siglo-de-existencia#sthash.wghPSGBD.dpbs ) 

jueves, 18 de enero de 2018

Tabarnia

Tabarnia


         
   Puede que lo de Tabarnia no parezca muy serio… pero es que tampoco lo ha sido nunca la llamada “vía unilateral”. Se cuestionará si son realmente una mayoría, pero los independentistas no lo han sido nunca. Es verdad que la creación de una nueva comunidad autónoma tendría que seguir procedimientos jurídicos demasiado complejos… pero mucho más complejo es independizarse. No creo que Tabarnia llegue a tener existencia jurídica como comunidad autónoma, del mismo modo que no creo que Cataluña vaya a independizarse. Sin embargo, como iniciativa ciudadana, Tabarnia tiene, y creo que seguirá teniendo, enorme utilidad. Porque sirve para poner al independentismo (y especialmente a la llamada “vía unilateral”) ante el espejo de sus contradicciones. Y en este caso, no ha hecho falta que el espejo haya sido demasiado cóncavo -ni tampoco, en realidad, que haya “héroes clásicos”, aunque algunos lo hayan podido creer- para que el resultado sea un auténtico esperpento. Tabarnia, con sus vídeos virales de “buen rollo”, con su “presidente en el exilio”, con su solemne bandera inventada, sirve para que se vea el ridículo en el que otros habían empezado a caer hace tiempo.


            Y es que, llegue o no a existir Tabarnia como comunidad autónoma, su derecho a serlo podría ser el mismo que el de Cataluña a ser un Estado independiente. Cuando separamos la soberanía del marco del Estado y la Constitución, para predicarla de cualquier entidad, entramos en arenas muy movedizas. Se habla mucho de Quebec, pero quizá se ignora que el Tribunal Supremo canadiense señaló que, en caso de independencia, esta provincia no tendría garantizada su integridad territorial, y el rechazo muy mayoritario en Montreal a la independencia puede que haya pesado en que esa idea se haya ido abandonando. Se habla mucho de Escocia, que a efectos prácticos podríamos decir que pudo ejercer su soberanía, decidiendo quedarse en el Reino Unido (bajo el presupuesto de que este estaba en la Unión Europea)…  pero en el referéndum del Brexit, Escocia “dejó de ser soberana”, ya que, a pesar de votar mayoritariamente por la permanencia en la Unión, se ve obligada a salir. En el referéndum de autodeterminación de las Comoras, la isla de Mayotte votó por quedarse en Francia… y así se hizo, pero ¿cuál era la entidad soberana, el archipiélago, o cada isla? Los independentistas han de saber que, si quieren seguir adelante con este proceso, tendrían que asumir el derecho de algunos territorios a no independizarse.  

(Fuente de la imagen: http://www.vozpopuli.com/politica/Tabarnia-presenta-bandera-escudo-funcion-ha-terminado_0_1098490865.html)